Verano de 1994. Un cronista y un camarógrafo estaban adentro de la Casa Rosada, clandestinos. HabÃan burlado la seguridad y entraron por una ventana. A unos metros, en la Plaza de Mayo, la marcha número 100 de los jubilados acababa de terminar en una batalla campal. HacÃa pocas semanas que el canal de Héctor Ricardo GarcÃa estaba al aire y esa era una de las coberturas de mayor repercusión desde la aparición de Crónica TV. Después llegarÃan noticias impactantes, como el crimen del soldado Omar Carrasco, el atentado a la AMIA, la muerte de Rodrigo, el suicidio del empresario Alfredo Yabrán o la tragedia de Cromañón, por citar sólo algunos de los innumerables hechos que conmocionaron al paÃs y marcaron la historia de esta señal.Las placas rojas, esos carteles enormes que permiten ser leÃdos desde el rincón de cualquier bar; Gilda, Sandro, los Pimpinela, Monzón, Messi y Maradona; uls, Boca y River; el Papa y el Gauchito Gil. La defensa de la soberanÃa de las Islas Malvinas y la eterna cruzada contra los "Piratas". Un pitufo fantasmagórico" en Catamarca y un perro condenado a muerte en Neuquén. Bernardo Neustadt, el pastor Giménez, Riverito y Anabela Ascar. Todo eso --y todos ellos-- fueron las claves del éxito de Crónica TV. A 25 años de su primera emisión, en estas páginas se cuenta el "detrás de las primicias": los secretos del canal que revolucionó el mundo de las noticias